Sin palabras la labor que llevan a cabo en esta casa que acoge a más de cien ancianos... Sólo pisar el jardín de entrada, nos llena de
admiración a los tres portavoces (el Sr. Diácono José Antonio, Marcelino y esta que escribe) que íbamos a entregar esa pequeña ayuda en nombre de los jóvenes de la parroquia y los jóvenes de la Hermandad de la Esperanza.
En nuestra breve visita hemos podido obervar la maravillosa misión que como vocación, desarrollan con los ancianos estas hermanitas de los pobres. Una congregación fundada por Santa Juana Jugan, canonizada el 11 de octubre del pasado año. "Ser pequeña para estar junto los humildes y estar junto a ellos para hacerlos felices". Éste es el carisma fundador de Juana Jugan.
De la mano de una hermana, hemos recorrido salas, comedores, capilla, habitaciones, teniendo un emociano encuentro con la anciana decana de la casa quien a sus cumplidos 102 años, hayamos en una cama de sábanas inmaculadas y en una habitación llena de luz.
Al salir de la casa, nos marchamos con la seguridad que nuestra pequeña aportación, ha llegado a buenas manos y que bien merece hacer un pequeño esfuerzo para que estos ancianos, tengan una vida digna y llena del cariño y el calor de esta congregación y de cuántos trabajan en esta casa.
Hemos puesto apenas un granito de arena en este inmenso desierto... Ojalá no sea la primera y última visita que hagamos... la primera y última iniciativa que tengamos hacia quienes nos necesitan.
En el álbum podrás encontrar algunas fotos más de esta visita...
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