sábado, 21 de agosto de 2010

ORDENACIÓN

Tras su paso en el último curso por nuestra parroquia como Diácono, nuestro amigo José Antonio Morón se ordenará sacerdote próximamente, un hecho que a todos nos llena de alegría.

Con tal motivo, ha remitido una invitación al grupo joven de la parroquia, con el deseo que le acompañemos con nuestra oración y asistencia, sobre todo, a su "primera Eucaristía".

Éste es el texto de su invitación:

Estando enormemente agradecido al Señor por el don de la vocación, me alegra comunicaros, junto con mi familia, que el próximo día 5 de septiembre (D.m.), a las 18,00 horas, seré ordenado sacerdote por el Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Juan José Asenjo Pelegrina, Arzobispo de Sevilla, en la S.M.P.I. Catedral de Sevilla.

Asimismo, os invito a que me acompañéis en la Santa Misa Solemne que celebraré el 19 de septiembre a las 20,00 horas en la Parroquia de Ntra. Sra. de Consolación de Umbrete.

A mi familia y a mí nos complacería compartir estos momentos con vosotros, contando con vuestra presencia y oración y así, agradecer a Dios la gran bondad que ha tenido conmigo.

José Antonio Morón Pardo

Seguro que un buen número de los que integramos el grupo joven, acompañaremos a José Antonio y celebraremos llenos de gozo, su primera Eucaristía, gritando junto a él: "Te basta mi gracia, mi fuerza se realiza en tu debilidad." (2Cor 12, 9)




sábado, 14 de agosto de 2010

ALZA EL VUELO

Alza el vuelo, hazte crecer las alas

y cruza los espacios y los tiempos,

-no existirían si tú no los pensaras-,

cierra los ojos, despójate de todo,

encierra el cuerpo y amanece el alma,

despégate de todo lo que pesa,

desata el nudo de las penas agrias,

navega al infinito

por esos mares breves de nostalgias,

coge al vuelo los versos y las risas,

prende al cielo el sol de una mirada,

cargada de no sé qué recuerdos,

asida de no sé qué añoranzas,

recupera los magos y los sueños,

los momentos azules de la infancia,

bautízate de fe y de fantasía,



olvida el suelo y salta

a los confines donde el amor nace,

donde nacen la vida y la esperanza,

donde beben sus versos los poetas,

donde crece la luna a la mañana,

allí donde tiembla el horizonte,

y está la estrella azul y más lejana,

en los parajes mágicos que habita

el corazón del que sufre y del que ama.




domingo, 8 de agosto de 2010

EL DIOS DE LO NORMAL


A veces parece más fácil encontrar a Dios en lo especial, en lo diferente, en lo extraordinario. En una experiencia única, en una amistad increíble, en un acto de heroismo, en una cruz tremenda...

Pero lo cierto es que también está en lo cotidiano, en lo que ocurre cada día, en el hoy. Y es importante aprender a verlo ahí.

Porque Tú Señor, eres el Dios de lo normal, de las horas tranquilas, de las relaciones serenas, de los gestos sencillos, de las melodías familiares, de las pequeñas alegrías y de las renuncias discretas.

Aunque a veces nos cuesta darnos cuenta. Parece que siempre tengamos que estar sintiendo mucho, viviendo mucho, experimentando algo nuevo, diferente. Parece que de otro modo, estaríamos encerrados en una vida vulgar.

Pero en realidad lo que es un poco tonto es valorar sólo lo especial, o creer que eso es lo que da sentido a la vida. Pero hay muchas vivencias cotidianas, que si lo pensamos bien, son algo grande: el pan nuestro de cada día, la palabra (llena de posibilidades), el buenos días al levantarnos, la sonrisa de aquel con el que nos cruzamos, las inquietudes por cosas sencillas...

Que aprendamos a valorar lo normal. Que aprendamos a descubrir al Dios del día a día.

Esta reflexión está inspirada en una agradable conversación mantenida en una cálida noche, con María Rojas, Marce, Maleni y López.